El candidato de la Alianza Quintana Roo Avanza recorre cientos de kilómetros y se reúne con miles de campesinos en Othón P. Blanco
NICOLÁS BRAVO, municipio de Othón P. Blanco, 22 de junio.- Necesitamos tecnificar el campo, mecanizar la tierra, meterle riego por goteo y aspersión para que produzca todo el año y haya empleo y bienestar en nuestras comunidades. La voz segura y firme de Roberto Borge Angulo, arranca de inmediato aplausos, porras que hacen vibrar el domo de usos múltiples y hacen estallar el júbilo de más de dos mil habitantes de esta alcaldía.
Este día ha sido especialmente intenso. Roberto Borge inició temprano su agenda en la capital de Quintana Roo con los constructores afiliados a la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, con quienes se compromete a adjudicaciones y licitaciones transparentes y a privilegiar a las empresas quintanarroenses para la realización de obras.
Al terminar, el Betobus ya lo espera en la puerta para partir rumbo a Altos de Sevilla, comunidad ubicada a unos 130 kilómetros de Chetumal. Ahí en el recién construido domo, un coro de más de 30 niños hace su mejor esfuerzo con el ¡A la bio, a la bao, a la bin bom ba, Beto, Beto, ra ra ra!.
Las voces infantiles por momentos se pierden ante la algarabía de la batucada, la música de los altoparlantes y las porras de los adultos, pero ellos no cesan y casi se desgañitan cuando el Betobus se estaciona frente al domo. Del vehículo descienden Roberto Borge, Carlos Mario Villanueva Tenorio, candidato a presidente de Othón P. Blanco, y Aurelio Joaquín González, de Cozumel, quien ha dejado su isla natal y viene a acompañar a sus compañeros candidatos.
–Para aquellos que decían que Beto Borge no venía a las comunidades, les voy a decir que estamos recorriendo por cuarta ocasión todo el Estado, de norte a sur, de este a oeste. Aquí estamos con nuestra gente.
Elda María Moén Briceño, delegada de Altos de Sevilla, es la encargada de dar la bienvenida a al visitante que llega hoy a establecer compromisos ante habitantes de esta región de Othón P. Blanco.
–Vengo comprometido con la gente de la zona rural para decirles que vamos a trabajar, vamos a hacer un gran trabajo para unificar todo el municipio de Othón P. Blanco y sus 146 comunidades.
Los rostros curtidos por el sol escuchan atentos las propuestas de Borge. Les ha planteado mecanizar tierras, introducir sistemas de riego por aspersión y goteo, impulsar la ganadería, construir infraestructura escolar, de salud, caminos rurales; en síntesis, una vida mejor, y ellos, los cientos de hombres y mujeres que nacieron y quizá morirán en esta tierra, saben que Borge Angulo habla con la verdad, con el corazón.
El Betobus corre otra vez por esas intrincadas carreteras interminables de Othón P. Blanco. Su destino inmediato San Pedro Peralta y Lázaro Cárdenas. Aparca en el domo y la escena se repite, más de mil habitantes coreando porras, gritando ¡Beto! ¡Beto! ¡Beto! ¡Beto!. Las manos se estiran, Borge les mira a la cara, los saluda, los abraza.
–Este domo deportivo, el EMSaD, las escuelas, los parques, los centros de salud, estas carreteras nuevas, las han hecho los gobiernos priistas –dice.
Y ofrece: “Van a contar con un gobernador que ayudará a la gente pobre, a la gente vulnerable. En nuestras comunidades no van a faltar medicinas, no van a faltar médicos”.
A media hora de distancia, el Betobus hace una nueva parada, ahora en la comunidad e Morocoy. El sol cae a plomo, inclemente, pero no mengua el ánimo de los asistentes, de mujeres, hombres y niños que hoy han salido a recibir a Borge porque creen en él, porque tienen confianza en su propuesta y porque su proyecto de gobierno es el mejor para Quintana Roo.
Las callosas manos saludan se suceden de una a otra en apretones amistosos, de confianza que le dicen en cada uno: ¡Beto estamos contigo, vamos a ganar!
Y Borge los arenga a trabajar duro, a redoblar esfuerzos para hacer de esta confianza, un voto contundente el 4 de julio.
La gira continúa en Nicolás Bravo. En esta alcaldía Borge es recibido por más de dos mil simpatizantes bulliciosos que han tomado por asalto el domo deportivo y lo han convertido en una auténtica sala de fiestas ante la visita de Borge Angulo.
En el corazón de la zona ganadera de Quintana Roo Borge anuncia la construcción de tres plantas procesadoras de lácteos, una en Othón P. Blanco, otra en José María Morelos y una tercera en Lázaro Cárdenas.
Ya por la tarde cuando el astro rey ha bajado su intensidad, Borge arriba a Subteniente López, donde lo esperan habitantes de esta comunidad y su anexo ejidal, Huay Pix, para quienes también tiene propuestas para impulsar el turismo y el ecoturismo.
La gira es agobiante, pero satisfactoria. “Esta campaña me ha enseñado a ser mejor persona, a ser más sensible, a conocer los verdaderos problemas de la gente y esa sensibilidad nos permitirá ser buenos gobernantes”.
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