Buzón Político
Por Emilio Carrasco Hernández

Los primeros indicios apuntan hacia la
comuna de Benito Juárez, dado que el asesor del alcalde Manuel Vera Salinas, trato de inútilmente de evitar el
cateo al domicilio de la súper manzana 20 por ser una oficina del Ayuntamiento.
Además, dentro de las instalaciones se
detuvo a Juan Ramírez presunto empleado de la dirección de seguridad pública y
se decomiso un “arsenal” de aparatos de alta tecnología para “espiar” a empresarios, políticos y
periodistas.
Ante los señalamientos y filtraciones de los
audios y documentos encontrados en el lugar de los hechos, el alcalde amparado
decidió mandar a la batalla electoral a su esposa, la cubana Niurka Sáliva, quien hizo gala de
sus dotes histriónicas al soltarse en un
mar de llanto.
Sin embargo, su “actuación” no quedo
ahí, porque aludió a su condición de dos
meses de embarazada de un par de
gemelitos. Empero dicen los que saben que a los dos meses, es muy difícil
determinar si son “cuates” a tan corta vida, donde el ser es un pequeño
embrión.
Está claro, Niurka Sáliva
trató de conmover al electorado, y sin
tener los pelos de la burra en la mano, afirmó que el Gobernador del
estado, Félix González Canto estaba detrás de las supuestas amenazas que habían
recibido sus familiares más cercanos, madres, hermanos y sobrinos entre otros.
La cubana, no presentó ninguna prueba de su
dicho, solo hizo gala de sus dotes histriónicas para aparecer en los medios de
comunicación y desviar la atención y presión ejercida sobre su marido, Gregorio
Sánchez como el principal sospechoso de haber armado el centro de espionaje.
Pero la estrategia de “Goyo” no solo
incluía a su esposo sino a sus aliados políticos los azurri, que salieron con
un estoica defensa bizarra a favor del alcalde amparado, culpando de todo a los
medios de comunicación por difundir los indicios que apuntan hacia el pre
candidato del PRD a la gubernatura del estado.
Aunque llama la atención, la posición de
Bolio, cuando por debajo del agua siempre decía a los medios de comunicación,
que la alianza no iba si Greg era el candidato, lo que deja perplejos a más de
uno, es que las fuerzas federales y la PRG, adopten una posición por demás indulgente con el único
detenido.
Juan Ramírez, un simple empleado de la comuna,
sin más preámbulo salió libre el sábado pasado después de pagar una cuantiosa
fianza y ser asesorado por prestigiados abogados, que lo mantiene en libertad y
con la posibilidad de “desaparecer” del mapa, como lo hizo su jefe Manuel
Salinas Vera.
Al parecer la “mafia” de la política
nacional encabezada por el propio partido blanquiazul ha metido las manos al
fuego por su aliado para negociar una salida digna, que los lleve a destronar
al PRI de su supremacía en el estado.
Ahora resulta que el centro de espionaje es
obra de Félix González Canto, que en sus tiempos libres se dedica a amenazar a
mujeres embarazadas y a sus familiares.
Claro que el gobernador y el propio PRI,
utilizan sus propios métodos para mantener al estado como un bastión priista, pero
darle el poder a una persona acusada de tantos delitos, y métodos ilegales para
llegar al poder, es como entregarle al diablo, el Vaticano.
Pero recuerden que en la política no hay
palabra.
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